Cultivos energéticos forestales
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Los cultivos leñosos para la obtención de biomasa con fines energéticos consisten en plantaciones o siembras de especies con determinadas características, como son la rapidez de crecimiento y la capacidad de rebrote después de la corta, con el objeto de producir una mayor cantidad de biomasa por unidad de superficie y tiempo.
En las condiciones edafoclimáticas de los montes de Galicia y del norte de Portugal, como especies energéticas arbóreas destacan: los eucaliptos (Eucalyptus spp.), el rebollo o cerquiño (Quercus pyrenaica), el sauce o salgueiro (Salix atrocinerea) y el abedul o bidueiro (Betula celtiberica).
En Portugal y otras regiones españolas se están empleando como cultivos energéticos los chopos (Populus spp.), la pawlonia (Pawlonia spp.), el miscanto (Miscanthus x giganteum), el cardo (Cynara cardunculus) o el sorgo (Sorghum bicolor), entre otras.
Además de las especies arbóreas, existen especies arbustivas, muy frecuentes en los montes gallegos e portugueses, que también pueden ser utilizadas como especies energéticas. Entre otras, podemos citar la retama o xesta (Cytisus striatus), escobón o xesta (Cytisus scoparius) y el tojo (Ulex spp.).
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